Hemos celebrado en el Colegio la semana de la Paz. Se han realizado diversas actividades para ayudarnos a reflexionar sobre la necesidad que todos tenemos de ser constructores de la civilización del amor, sembrando la semilla de la paz.
Hemos tenido el privilegio de contar con el testimonio de tres refugiados que viven en la casa natal de San José de Calasanz, en Peralta de la Sal. Osama, un joven marroquí de 21 años, Yeid nacido en Palestina y que tiene 26 años y Yoselín, venezolana de 32 años.
Los tres han compartido sus testimonios de vida con el alumnado de secundaria. Testimonios realmente conmovedores y que nos han ayudado a abrir los ojos y escuchar con el corazón estas historias de vida. Ellos son un ejemplo de las miles de personas que han tenido que abandonar a la fuerza sus países porque sus vidas corrían algún tipo de peligro. Personas que han venido a nuestro país en búsqueda de paz, dejando en sus países de origen a sus seres queridos.
Estas historias de vida nos han abierto los ojos y han ayudado a nuestros alumnos a ver con sus propios ojos que la gente sigue sufriendo las consecuencias y los desastres de la guerra y que desean, de todo corazón, poder vivir en paz, en sus países y junto a sus seres queridos.
Los testimonios que nos han dado los hemos escuchado todos, profesorado y alumnado, con mucha atención e interés. Les hemos preguntado acerca de su situación actual, de sus sueños y deseos. Y ellos, además de darnos su testimonio personal, nos han transmitido un mensaje: Que merece la pena luchar por conseguir nuestros sueños, que podemos aprender de nuestros errores, que nos podemos ayudar a vivir en paz y que la libertad nada ni nadie tiene derecho de arrebatárnosla.
Historias de vida que llegan a nuestros corazones. Ojalá nos ayuden a trabajar por construir un mundo de paz y de fraternidad, pidiéndole a Dios que la guerra, el dolor, el sufrimiento, la injusticia, el hambre de los demás no nos sea indiferente.
Jimmy Gimeno
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